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Pronóstico del Tiempo en Puebla de Zaragoza: Lo que Nos Traerá el 23 de Marzo
Aparte de consultar el pronóstico del tiempo para determinar qué vestir o si llevar un paraguas, el reporte meteorológico se ha vuelto esencial para diversos rubros, abarcando el transporte aéreo, marítimo y terrestre, la agricultura, el turismo, la prevención de calamidades, la salud pública y actividades militares.
La predicción del tiempo es ya de por sí compleja, y la situación se ve agravada por el cambio climático, que aumenta la necesidad de estar actualizados para ejecutar estrategias gubernamentales que reduzcan el riesgo de catástrofes, como alertas para inundaciones, sequías, olas de frío y otros fenómenos adversos.
En este escenario, aquí se presenta el reporte meteorológico para Puebla de Zaragoza del 23 de marzo:
El pronóstico del domingo en Puebla de Zaragoza alcanzará los 27 grados, con una temperatura mínima de 13 grados. Se anticipa que el índice de rayos ultravioletas llegue a un nivel de 12.
En lo que concierne a las precipitaciones, la probabilidad de lluvia se sitúa en el 25%, con un 34% de nubosidad durante el día; y un 1% de posibilidad de lluvia con un 56% de nubosidad por la noche.
Adicionalmente, se prevén ráfagas de viento que alcanzarán hasta 33 kilómetros por hora durante el día y de 28 kilómetros por hora en la noche.
Puebla presenta un clima fundamentalmente templado, con variaciones en la humedad. Durante el verano, se generan las lluvias más asiduas, a pesar de que la escasez de precipitaciones en ciertas zonas se debe a que las montañas dificultan la llegada de nubes cargadas desde el Golfo de México.
Las sierras de Tehuacán, Nevada, Norte y Citlaltépetl suelen tener una temperatura moderada; la Mixteca Poblana, la sierra Norte y la Sierra de Quimixtlán manifiestan un clima cálido; mientras que el valle de Tehuacán y los llanos de San Juan y San Andrés presentan un clima árido o semiárido.
En Puebla, las temperaturas promedio anuales fluctúan entre 11 y 27 grados. Se aconseja a los viajeros visitar el estado entre mediados de febrero y principios de mayo, cuando el clima es más placentero.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la temperatura máxima promedio anual en Puebla ha subido 2.2 grados, de 27.9 grados en 1985 a 30.1 grados en 2020; y la mínima se ha incrementado 1.9 grados, de 13 grados en 1985 a 14.9 grados en 2020.
México se considera uno de los países con mayor biodiversidad del planeta. Su localización geográfica le otorga una amplia gama de climas, convirtiéndose en el hogar del 12% de las especies del mundo, de las cuales 12,000 son endémicas.
La nación está situada entre dos regiones climáticas: una tropical y otra templada. Esta dualidad se ve condicionada por los océanos y las diferentes altitudes que la rodean, generando variadas condiciones climáticas.
Por lo tanto, es posible encontraren Chihuahua las temperaturas oscilan alrededor de los -30 grados, mientras que en el desierto de Mexicali, el termómetro puede llegar hasta los 50 grados.
México cuenta con una región cálida y lluviosa a lo largo de la costa baja del Golfo de México y el Océano Pacífico; áreas cálido-húmedas y cálido-subhúmedas en llanuras costeras y en la Península de Yucatán; climas áridos en las Sierras Madres y zonas templadas principalmente al norte del trópico de Cáncer; además de regiones semidesérticas al norte del Altiplano.
La temperatura media en México es de 19 grados, aunque existen localidades como Mexicali, Culiacán, Ciudad Juárez, Hermosillo, Torreón, Saltillo y Monterrey donde el calor extremo es habitual.
En cuanto a temperaturas récord en el país, es importante señalar que en San Luis Río Colorado, Sonora, se registró un asombroso 58.5 grados el 6 de julio de 1966, mientras que el récord más bajo ocurrió en el municipio de Madero, Chihuahua, con -25 grados el 27 de diciembre de 1997.
Especialistas advierten que el cambio climático causará una reducción en las lluvias anuales y un aumento notable en las temperaturas venideras; además, las sequías y las severas inundaciones han afectado de manera desfavorable a agricultores y ganaderos en los últimos años, mientras que las olas de calor han elevado las contingencias ambientales en ciudades principales como la CDMX o Monterrey.
