“Bogotá: La fascinante aventura del contrabando en la nueva joya cinematográfica de Netflix”

En los últimos años, diversas producciones extranjeras se han filmado en Colombia; no obstante, la manera en que representan al país sudamericano o las aluciones al delito y al narcotráfico ha suscitado críticas de numerosos compatriotas por la realización de ese tipo de películas en el país.

Por ejemplo, el filme Medellín, que forma parte del catálogo de Prime Video, incluye varias referencias al narcotráfico y, como tema principal, un hipotético culto en Medellín hacia Pablo Escobar y el cartel de Medellín, lo que llevó a que, tras su lanzamiento, varios líderes políticos desaprobaran que este tipo de producciones se lleven a cabo en el país.

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El 3 de febrero, Netflix lanzó un largometraje producido en Corea del Sur que fue grabado en 2020 entre Cartagena y Bogotá. La trama gira en torno a un joven coreano que llega a la capital colombiana para adentrarse en el mundo del contrabando.

Bogotá, tierra de últimas oportunidades, es dirigida por Seong-je Kim y cuenta con la participación de actores como Song Joong-ki, Lee Hee-jun, Kwon Hae-hyo o Ji-hwan Cho; además, también colaboran en la historia varios artistas colombianos.

Aunque en Colombia se busca distanciarse de las glorificaciones al delito, el actor Lee Hee Joon mencionó que esta película no está destinada a retratar negativamente al país, ya que no aborda drogas o carteles, sino contrabando, que representa un problema que no se limita solo a Latinoamérica.

“Me pareció singular porque la narrativa no trata sobre drogas o armas, sino sobre contrabando y comercialización de ropa interior”, declaró el coreano a El Colombiano.

Otro aspecto importante es que este filme es el primero de origen coreano que recibió el beneficio de la Ley 1536, que “proporciona incentivos económicos a filmaciones extranjeras en el país” latinoamericano.

Con el propósito de cumplir con los requisitos necesarios para recibir el mencionado beneficio, para la producción se contrataron 200 colombianos que participaron en la preproducción del largometraje junto con las empresas Watermelon Pictures Co, Megabox Plus M e Idioplan.

Hasta la fecha, la película ha logrado un gran éxito en la plataforma de streaming, siendo la segunda más vista a nivel mundial, se encuentra en el top 10 en 87 países, ocupando el primer lugar en 18 de ellos. En Colombia, se posiciona en la segunda ubicación de producciones más vistas, solo superada por El juego del calamar.

Con estas cifras, Netflix pretende cambiar la percepción que existe sobre esta producción, queen Corea del Sur fue considerada un insuceso debido a que solo alcanzó poco más de 400.000 espectadores durante el tiempo que estuvo en exhibición.

A pesar de que el filme aborda la violencia ocurrida en el país durante la década de los 90, en el comunicado emitido por la Alcaldía de Bogotá para referirse a la primera película coreana filmada en la capital del país, no se hizo mención de este aspecto.

De hecho, la Administración local señaló que después de caer en la bancarrota en su nación, el personaje principal llega a Bogotá para prosperar “gracias a las oportunidades que le brinda la ciudad”.

“A pesar de la lejanía y el sufrimiento de la pérdida, Guk-hui no abandona sus orígenes y, al cumplir 19 años, toma la inquebrantable decisión de regresar a Corea para retomar lo que considera su destino. Con un ímpetu inagotable, empieza a trabajar sin descanso, buscando oportunidades que le ayuden a avanzar. En este trayecto se enfrenta a un sinfín de desafíos”, comentó la Alcaldía de Bogotá sobre el lanzamiento en Netflix de esta película.