Negociazo con fintechs que crece como espuma en Colombia desde hace meses

Un ejemplo destacado es Payana, una startup argentina que ofrece soluciones de inteligencia artificial para la contabilidad empresarial, la cual decidió establecer su sede principal en Colombia.

Según su CEO, Matías Umaschi, el país ofrece una combinación ideal de talento técnico, exigencias regulatorias sofisticadas —como la facturación electrónica impuesta por la Dian— y un entorno emprendedor receptivo a nuevas tecnologías.

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Estas condiciones han permitido que Payana ayude a automatizar procesos clave como el registro de facturas, pagos, nómina y tesorería, integrándose con bancos y autoridades como la Dian.

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Además, su plataforma utiliza lenguaje claro y accesible, facilitando el control financiero a las empresas.

Este auge forma parte de un ecosistema más amplio en el que Colombia ha visto crecer un 24 % el número de startups en un año, alcanzando 2.126 emprendimientos mapeados según el Colombia Tech Report 2024.

El país atrae fundadores de Argentina, México, Chile y EE. UU. gracias a su diversidad, infraestructura digital y mercado interno robusto. Así, Colombia se proyecta como una plataforma ideal para lanzar startups con visión global desde América Latina.

Por qué las fintechs y startups son claves en Colombia

La existencia y crecimiento de más fintechs y startups en Colombia es fundamental para impulsar la transformación económica, tecnológica y social del país. En primer lugar, estas empresas emergentes representan una vía clave para diversificar la economía colombiana, históricamente dependiente de sectores tradicionales como el petróleo, el carbón y la agricultura. Las fintechs, por ejemplo, han irrumpido con fuerza en el sistema financiero, ofreciendo soluciones más eficientes, inclusivas y tecnológicas para la gestión de pagos, créditos, ahorro, seguros y servicios contables, que antes estaban reservados a un número limitado de usuarios bancarizados. Este tipo de innovación reduce barreras de acceso al sistema financiero y fortalece la inclusión, especialmente en regiones apartadas o sectores vulnerables de la población.

Además, el ecosistema emprendedor liderado por startups genera nuevas fuentes de empleo altamente calificado, retiene talento local y promueve el desarrollo de habilidades en áreas como la programación, análisis de datos, inteligencia artificial y ciberseguridad. Esto es clave en un país donde muchos jóvenes aún enfrentan altas tasas de desempleo. Las startups también actúan como catalizadores de una cultura de innovación, fomentando la creatividad, el pensamiento crítico y la mentalidad de solución de problemas, cualidades que el país necesita para enfrentar los desafíos del siglo XXI.

Otro aspecto crucial es que las fintechs y startups están ayudando a modernizar sectores clave de la economía colombiana. En áreas como la salud, la educación, el transporte, el comercio y la logística, estas empresas introducen modelos de negocio más ágiles y centrados en el usuario, lo cual mejora la calidad de vida y optimiza el uso de recursos. Además, su capacidad para escalar rápidamente y adaptarse a los cambios del mercado convierte a estas empresas en motores de competitividad y resiliencia económica.

Por último, el crecimiento del ecosistema de fintechs y startups posiciona a Colombia como un referente regional para la inversión extranjera y la colaboración internacional. A medida que el país fortalece su infraestructura digital, mejora su regulación y demuestra su apertura a la innovación, se vuelve más atractivo para fondos de venture capital, aceleradoras y founders extranjeros. Este entorno dinámico no solo promueve el nacimiento de nuevas empresas, sino que también ayuda a consolidar una economía más digital, inclusiva y sostenible.

Cuáles son retos de fintechs en Colombia

Adicionalmente, el auge de fintechs y startups en Colombia contribuye significativamente a reducir la informalidad económica, uno de los grandes retos del país. Muchas de estas empresas ofrecen herramientas tecnológicas que permiten a pequeños negocios y trabajadores independientes digitalizar sus operaciones, emitir facturas electrónicas, llevar contabilidad en tiempo real y acceder a servicios financieros adaptados a sus necesidades.

Esto no solo mejora la transparencia fiscal, sino que también facilita la formalización, el acceso a créditos y la posibilidad de crecimiento económico para miles de emprendedores. A medida que más colombianos se vinculan a plataformas digitales, se construye un ecosistema empresarial más sólido y trazable, con efectos positivos tanto para el Estado como para la ciudadanía.

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