Economia
Colombia paga el sexto interés de deuda más alto del mundo y su situación fiscal es ‘insostenible’, revela informe

Una de las principales preocupaciones económicas del país en los últimos meses ha sido el alto costo del endeudamiento público. De acuerdo con el Marco Fiscal de Mediano Plazo 2025, Colombia deberá destinar alrededor de 86 billones de pesos al pago de intereses, lo que equivale al 4,7 por ciento del producto interno bruto (PIB), uno de los niveles más altos de la historia.
Este significativo pago se debe en gran medida al continuo encarecimiento de la deuda pública. Por ejemplo, la tasa de los títulos de deuda pública (TES) a 10 años ha aumentado 240 puntos básicos en el último año, pasando de 10,3 por ciento en junio de 2024 a 12,7 por ciento en junio de 2025.
Lo más preocupante es que Colombia se posiciona como el sexto país con la deuda más costosa del mundo, si se mide por la tasa de los bonos soberanos a 10 años en moneda local, según revela un informe del equipo de Investigaciones Económicas del Banco Popular.
Con una tasa del 12,67 por ciento, solo es superada por Líbano, Turquía, Nigeria, Brasil y Rusia. Esta cifra incluso está por encima de la de países como Pakistán (12, por ciento) y Sudáfrica (10,1 por ciento).
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Informe ‘El Alto Costo de la Deuda’ del equipo de Investigaciones Económicas del Banco Popular. Foto:Investigaciones Económicas del Banco Popular
Este elevado nivel refleja la alta prima de riesgo que el mercado percibe sobre Colombia, especialmente al contrastarlo con los fundamentos macroeconómicos de los países que comparten este grupo.
A pesar de que la tasa de intervención del Banco de la República es inferior a la de Pakistán, Colombia sigue pagando intereses más altos. De hecho, los países con una deuda más costosa que Colombia presentan tasas de referencia y niveles de inflación considerablemente mayores.
Para el equipo de Investigaciones Económicas del Banco Popular, la situación es aún más delicada si se analiza la tasa de endeudamiento en bonos a 10 años denominados en dólares: Colombia se ubica entre los tres países con el mayor costo, solo por debajo de Ucrania y Argentina.
Este patrón también se observa al comparar el Credit Default Swap (CDS) a 10 años, donde el indicador colombiano alcanza los 345 puntos, superado únicamente por Argentina (785) y Turquía (381).
En conjunto, estos indicadores evidencian el complejo panorama que enfrenta la deuda pública colombiana en los mercados internacionales. El deterioro fiscal acumulado en los últimos años, sumado a la incertidumbre sobre el futuro económico del país, ha incrementado de forma considerable la prima de riesgo.
Informe ‘El Alto Costo de la Deuda’ del equipo de Investigaciones Económicas del Banco Popular. Foto:Investigaciones Económicas del Banco Popular
Aunque tras la publicación del Marco Fiscal de Mediano Plazo el mercado anticipa una posible reducción en la calificación crediticia, el equipo de Investigaciones Económicas del Banco Popular asegura que desde hace un par de años los inversionistas ya negocian la deuda colombiana como si se tratara de un país con un grado de calificación inferior al que actualmente otorgan las principales agencias calificadoras.
Adicionalmente, para Henry Amorocho Moreno, profesor de Hacienda Pública y Presupuesto de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad del Rosario, las cifras reveladas en el MFMP confirman que el país atraviesa una situación fiscal insostenible, agravada por debilidades estructurales en el sistema tributario y en el manejo del gasto público.
Al comparar las proyecciones actuales con las estimaciones hechas en diciembre de 2024, se observan modificaciones significativas en el cálculo de los ingresos, lo que para el profesor Henry Amorocho evidencia “graves dificultades en la planeación y ejecución tributaria del país”.
Se trata de una ineficiencia administrativa en la gestión fiscal y tributaria
Henry Amorocho MorenoProfesor de Hacienda Pública y Presupuesto de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad del Rosario
Mientras que el proyecto de presupuesto para 2026 estima los recaudos tributarios en 321,6 billones de pesos, el MFMP los ajusta a la baja a 281,4 billones de pesos, lo que representa una diferencia de 40 billones de pesos.
Para el académico, esta discrepancia no obedece a factores coyunturales, sino a un problema estructural persistente. “Se trata de una ineficiencia administrativa en la gestión fiscal y tributaria que debe ser atendida con soluciones de fondo”, advierte.
En ese sentido, considera inaplazable iniciar la elaboración y presentación de un proyecto de reforma tributaria estructural, en lugar de continuar recurriendo a reformas de corto plazo, como la sugerida por el Ministerio de Hacienda el pasado 13 de junio cuando presentó el MFMP.
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Foto:iStock.
Según el MFMP, el Gobierno Nacional contempla dos caminos para sostener el aumento de los ingresos en 2026: una reforma tributaria que permitiría recaudar cerca de 19 billones de pesos o un nuevo endeudamiento por 38 billones de pesos.
Sin embargo, incluso con esas medidas, el incremento proyectado en el recaudo tributario durante los próximos cinco años es apenas entre el 0,4 y el 0,9 por ciento del PIB, lo que revela, en palabras del profesor de la Universidad del Rosario, una “baja efectividad en la gestión del sistema tributario”.
El panorama del gasto público es igual de preocupante. En los próximos cinco años solo se proyecta una reducción del 2,5 por ciento del PIB sin ninguna propuesta de reforma estructural.
Una mejora marginal que no resuelve el problema de fondo
Henry Amorocho morenoProfesor de Hacienda Pública y Presupuesto de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad del Rosario
Además, no se aborda la urgente convergencia entre el nuevo Sistema General de Participaciones, aprobado en 2024, y el proyecto de Ley de Competencias que actualmente se estudia en el Congreso de la República.
A ello se suma la previsión de un endeudamiento de 38 billones de pesos en un contexto en que el gasto público ya equivale al 24,4 por ciento del PIB en 2025. La deuda pública, por su parte, apenas se reduciría del 61 al 60 por ciento del PIB en cinco años. “Una mejora marginal que no resuelve el problema de fondo”, afirma Henry Amorocho.
Las calificadoras de riesgo también han expresado su preocupación. Fitch Ratings advirtió oficialmente sobre el deterioro fiscal colombiano, agravado por la decisión del Gobierno de aplicar una cláusula de escape que suspende la regla fiscal durante tres años, elevando el déficit del 5,1 al 7,1 por ciento del PIB.
Germán Ávila, ministro de Hacienda. Foto:Néstor Gómez EL TIEMPO
El crecimiento económico tampoco acompaña este panorama: el PIB se proyecta con un promedio de apenas 2,8 por ciento para los próximos cinco años, tan solo 0,1 por ciento por encima del crecimiento estimado para este año.
Para el profesor Henry Amorocho, esta situación demuestra que “la fórmula actual —gasto en aumento, ingresos estancados y más deuda— no es viable y solo traslada el problema a futuras administraciones”.
Frente a este escenario, el experto enfatiza que el país necesita adoptar cambios estructurales profundos. Esto implica una reforma tributaria integral que revise la estructura tarifaria, las bases gravables y las exenciones, de forma rigurosa y técnica.
Es necesario acabar con la redundancia de competencias y hacer más eficiente el uso de los recursos públicos
Henry Amorocho morenoProfesor de Hacienda Pública y Presupuesto de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad del Rosario
En cuanto al gasto, propone una revisión funcional del Estado para identificar y eliminar duplicidades de funciones y procesos en distintas instituciones del Estado. “Es necesario acabar con la redundancia de competencias y hacer más eficiente el uso de los recursos públicos”, afirmó.
También concluye que una combinación de reforma tributaria estructural y reforma del gasto permitirá al país recuperar la sostenibilidad fiscal, fortalecer su economía y proteger la salud de sus finanzas públicas. Solo así se podrá enfrentar con responsabilidad el difícil contexto fiscal que vive Colombia actualmente.