Connect with us

Economia

Expertos proponen actualizar esquema de inflación objetivo en Colombia | Crecimiento | Economía

Published

on


Desde el año 2000, Colombia ha operado bajo un esquema de inflación objetivo como marco de su política monetaria, con una meta explícita del 3% que ha permitido orientar las expectativas de hogares y empresas.

(Lea: Salario mínimo e inflación: efecto del aumento salarial en el costo de vida para 2026). 

Durante este período, el país logró reducir significativamente los niveles elevados de inflación que caracterizaron décadas anteriores, contribuyendo a un entorno más predecible para la toma de decisiones económicas. Sin embargo, tras un análisis realizado por la firma Sectorial, se plantea la necesidad de revisar y actualizar este marco de política monetaria ante un entorno económico cada vez más complejo y desafiante.

El esquema de inflación objetivo ha fortalecido la reputación del Banco de la República como una entidad técnica y autónoma, mejorando la previsibilidad económica tanto a nivel empresarial como en el sector público. La tasa de interés, ajustada por la autoridad monetaria, ha sido la herramienta principal para alcanzar este objetivo durante dos décadas y media.

(Vea: ¿Inclusión de Petro en lista Clinton afecta viajes a EE. UU. de ciudadanos colombianos?). 

No obstante, “el entorno económico actual presenta condiciones que no existían cuando se implementó el esquema; y eventos como la pandemia, la fragmentación de las cadenas de suministro globales y los efectos del cambio climático han hecho más frecuentes los choques de oferta, que afectan los precios sin necesariamente responder a variaciones de la demanda”, afirma Alejandro Escobar, gerente estratégico de Sectorial.

En su opinión, teniendo en cuenta el contexto actual, modificar las tasas de interés no siempre resulta eficaz para controlar la inflación y puede generar efectos adversos sobre el crecimiento económico o el empleo. Los choques de oferta, riesgos climáticos y cambios sociales limitan la efectividad de las herramientas tradicionales.

El gerente estratégico de Sectorial propone revisar el marco vigente sin abandonar el objetivo central de estabilidad de precios, a través de dos estrategias:

1. Ampliar la meta a un rango: una de las propuestas más frecuentes es reemplazar la meta puntual del 3% por un rango, por ejemplo, del 2% al 4%. Esto permitiría mayor flexibilidad frente a choques temporales y podría reducir la necesidad de aplicar medidas restrictivas que afecten la actividad económica.

2. Incluir objetivos complementarios: también plantea considerar variables adicionales como el empleo o la estabilidad financiera en el análisis de política monetaria. Países como Estados Unidos ya operan con mandatos duales que incluyen la estabilidad del empleo junto al control de la inflación.

“La actualización del esquema no debe interpretarse como una crítica a su desempeño. Al contrario, el esquema ha sido eficaz en el cumplimiento de su propósito original. El punto es que el contexto ha cambiado, y conviene revisar si el marco actual sigue siendo el más adecuado para los desafíos del presente y del futuro”, afirma el experto de Sectorial.

(Además: Abren zona VIP para viajeros… por fuera del aeropuerto: ¿de qué se trata y cómo usarla?). 

Para Escobar, adoptar un rango meta más amplio y considerar otras variables en el análisis permitiría al Banco de la República tomar decisiones más balanceadas y mantener mayor capacidad de respuesta frente a los desafíos económicos actuales.

“Se trata de mantener la estabilidad de precios como objetivo central, pero con herramientas que respondan mejor a las condiciones actuales”, concluye. 

PORTAFOLIO

Continue Reading
Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *