Economia
Revolución Económica: Las Remesas Colombianas Superan por Primera Vez las Exportaciones Petroleras en Febrero

Las declaraciones del presidente Donald Trump sobre la implementación de arancelesrecíprocos a 185 países con los que Estados Unidos mantiene comercio, como un método de presión para iniciar diálogos con los distintos estados, ha provocado una tormenta geopolítica, una gran incertidumbre global y una oleada de pesimismo respecto al futuro de la economía y los efectos que pueda acarrear.
Y, como si fuera poco, esta elección provocó un efecto dominó en el mundo. El panorama comienza a oscurecerse y el impacto se encuentra por determinarse. Sin embargo, ya existe un anticipo de lo que podría venir: el nuevo escenario ha hecho que la probabilidad de una recesión en Estados Unidos haya incrementado del 40 % al 60 %, según JP Morgan, colocando los tesoros en su punto más bajo desde el último cuarto del año pasado.
A esto se unió la inesperada decisión de ocho naciones miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo Plus (Opep+), que anunciaron la incorporación de 411.000 barriles diarios adicionales en su producción total a partir de mayo, una cifra tres veces superior a la proyección inicialmente prevista de 138.000 barriles por día.
Esta circunstancia provocó una caída del 6.5 % en los futuros del petróleo brent (61.99 dólares por barril) y del 7.4 % en la referencia WTI (65.58 dólares por barril), niveles no observados en cuatro años, según un informe de Anif. Añadió que Goldman Sachs ajustó al alza sus proyecciones sobre la oferta. De esta forma, predice un brent de 62 dólares y un WTI de 58 dólares “en un escenario de aterrizaje suave, aunque advierte que, ante desequilibrios mayores entre oferta y demanda, el brent podría descender a 54 dólares o incluso por debajo de 40 dólares”.
No obstante, de manera silenciosa y con una tendencia sostenida, las remesas, o sea, los giros que realizan a sus familias en Colombia los trabajadores colombianos que residen en el exterior, marcaron un hito histórico en febrero: superaron las exportaciones de petróleo y sus derivados como la principal fuente de divisas para Colombia, según un informe de Corficolombiana que señaló el dato. Este acontecimiento, según esta firma, no sucedía desde 2003, excluyendo la pandemia.
En febrero, indica el análisis, los ingresos por exportaciones de petróleo crudo descendieron a 762 millones de dólares, su cifra más baja desde abril de 2021, y en el año móvil finalizado en febrero sumaron 11.940 millones de dólares. La disminución de las exportaciones se debe a dos factores principales: precios internacionales reducidos del barril de petróleo y el deterioro de la producción interna.
Por su parte, las remesas alcanzaron 1.031 millones de dólares en febrero y 12.058 millones en los últimos 12 meses, “una cifra histórica que las posiciona como
la principal vía de ingresos en divisas para la nación. Esto ilustra el incremento del movimiento migratorio y el destacado rendimiento económico de naciones como Estados Unidos y España, que son los principales orígenes de nuestras remesas”, comenta Corficolombiana.
El caudal de remesas hacia Colombia evidenció una tendencia ascendente tras la pandemia, alcanzando cifras récord en los últimos años. En 2023, el país sobrepasó, por primera vez, los 10.000 millones de dólares anuales en remesas, y desde junio de 2024 el caudal mensual ha excedido los 1.000 millones de dólares, detalla la entidad.
Hasta febrero, las remesas se habían establecido como la segunda mayor fuente de divisas del país, solo detrás de las exportaciones de petróleo. Esta situación cambió en el segundo mes de este año.

“Prevemos que los flujos de remesas hacia Colombia incrementarán un 10 % en 2025, alcanzando un nuevo récord histórico de 13.000 millones de dólares, lo que equivale a 56,6 billones de pesos o el 3,1 % del PIB”, afirmó Corficolombiana en un análisis de proyecciones para este año, y anticipó que, en 2025, los ingresos en dólares provenientes de remesas sobrepasarían a los del petróleo. Además, se estima que podría representar más del 3 % del PIB. Este análisis también indica que las remesas en pesos colombianos han recibido un impulso adicional en los últimos cinco años, debido a la depreciación del 21,9 % que ha experimentado la tasa de cambio desde 2019. “El efecto cambiario también motivará las remesas en pesos colombianos en 2025, dado que proyectamos una depreciación media del tipo de cambio del 6,0 % en 2025″.
Entre los factores que han impulsado las remesas a niveles históricos resalta la aceleración de la migración de colombianos al extranjero en el periodo posterior a la pandemia. Entre 2021 y 2024, el estudio añade, el flujo migratorio creció en promedio un 5,4 % anual (comparado con el 4,0 % registrado entre 2014 y 2019), alcanzando una salida neta de 365.000 colombianos hacia el exterior, es decir, aproximadamente 1.200 personas diarias o 440 mil al año, lo que equivale a la población de ciudades intermedias como Neiva o Armenia.

El 67 % de las remesas que llegaron al país en 2024 provinieron de Estados Unidos y España, economías que habrían concluido el año anterior con aumentos del 2,8 % y 2,9 %, respectivamente, según estimativas del Fondo Monetario Internacional (FMI). “El buen rendimiento de estos países se reflejó en su mercado laboral. La tasa de desempleo de Estados Unidos se mantuvo cerca de sus mínimos históricos, alrededor del 4,1 %, mientras que la de España se situó en 11,6 %, el mínimo desde 2008”, dice Corficolombiana.
No obstante,
Esta positiva novedad en medio de las tensiones petroleras y la ambigüedad, no se escapa a la crisis global y podría influir en el flujo de remesas hacia Colombia. ¿A qué se debe esto?
Uno de los pilares fundamentales en los planes del presidente Donald Trump es el tema migratorio. A lo largo de su campaña, Trump sugirió implementar un esquema para llevar a cabo “la mayor operación de deportación en la historia de Estados Unidos”, lo que daría lugar a la expulsión de migrantes en situación irregular y aquellos con antecedentes penales.
Como en su momento detalló María Claudia Lacouture, presidenta de la Cámara Colombo Americana AmCham Colombia, esta propuesta tiene como finalidad restaurar la seguridad en las comunidades y fortalecer el respeto por las normativas de inmigración del país, donde aquellos que cumplen con las reglas legales puedan permanecer. En cuanto a seguridad fronteriza, se plantea culminar el muro fronterizo y aumentar la seguridad en la frontera sur para lograr la detención de la inmigración ilegal y el tráfico de estupefacientes. Se enviaría personal militar adicional y se aplicarían políticas más severas para asegurar que la frontera de Estados Unidos sea sólida y proteja la soberanía nacional respecto a la seguridad de todos los ciudadanos.
Por su parte, Anif, tras la victoria electoral de Trump, manifestó que presenta desafíos importantes para Colombia y los demás países de América Latina y el Caribe receptores de remesas. “Entre los principales riesgos se encuentran: la deportación masiva, que podría disminuir el número de migrantes trabajadores en Estados Unidos, limitando su capacidad para enviar dinero; y los impuestos a las remesas como parte de las políticas antiinmigrantes, lo que encarecería el envío de estas”.
La gran interrogante es si ese volumen de remesas, que ha ayudado a mitigar en parte el fortalecimiento del dólar, ante la caída en el precio del petróleo y la menor dinámica de la inversión extranjera directa, será sostenible a largo plazo y continuará siendo una fuente de ingresos para miles de familias en Colombia.