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Merab baja el ‘hype’ con Daguestán: “Las fuerzas celestiales no los ayudan”

El pasado 19 de enero en el UFC 311, Merab Dvalishvili (19-4) demostró al mundo que los daguestaníes son igual de mortales que el resto de peleadores al ganar por decisión unánime a Umar Nurmagomedov, defendiendo exitosamente su cinturón de peso gallo. Hasta esa fecha, ningún miembro de la familia de Khabib había sido derrotado. De hecho, el récord de la mayoría de peleadores de la región de Daguestán suele estar acompañado de un cero en el casillero de derrotas, lo que había creado en torno a su figura un aura de imbatibilidad. Recientemente, Dvalishvili les ha humanizado, dejando claro que son iguales que cualquier otro.
“Los daguestaníes son buenos luchadores. Siempre han sobresalido en las artes marciales… pero al mismo tiempo, son gente normal y corriente”, reconocía Merab en unas declaraciones a Europop. La calidad de los peleadores de estas montañas, sobre todo en el grappling y en la pelea en suelo, es única. Sin embargo, Merab dio una lección el pasado mes a Umar para demostrarle que no son imbatibles. En una exhibición de cardio y pundonor, ‘The Machine’ remontó un combate en el que estaba contra las cuerdas, desfondando por completo al primo de Khabib para acabar imponiéndose por decisión unánime.
Khabib terminó invicto, pero simplemente no se enfrentó a un oponente digno
La figura de Khabib Nurmagomedov (29-0) fue la primera piedra sobre la que se fueron asentando el resto de generaciones daguestaníes. El récord invicto de ‘The Eagle’ precedió otros casos como el de Islam Makhachev (27-1, campeón de peso ligero), Umar Nurmagomedov (18-1) o Usman Nurmagomedov (19-0, campeón de peso ligero de Bellator y PFL), pero para Merab no hay nada especial o sobrenatural en él aura que desprenden. “Las fuerzas celestiales no los ayudan. Son deportistas normales y corrientes, y otros pueden derrotarlos, como se vio en mi caso. Khabib terminó invicto, pero simplemente no se enfrentó a un oponente digno”, finalizó el campeón de peso gallo.
Khabib, Umar, Usman y Abdulmanap Nurmagomedov.
2025, el año del golpe de realidad
De hecho, no está siendo el mejor año para los peleadores de esta región rusa. Más allá de la contundente victoria de Islam Makhachev ante Renato Moicano para defender por cuarta su cinturón de peso ligero en el pasado UFC 311, los daguestaníes no están cumpliendo con las expectativas esperadas en este inicio de 2025. La derrota de Umar ante Merab fue la primera píldora de lo que ha venido después, con varias actuaciones que han dado la razón a las palabras de Dvalishvili.
Usman Nurmagomedov, hermano de Umar y primo de Khabib, defendió una semana después del UFC 311 su cinturón de peso ligero de Bellator ante el irlandés Paul Hughes. Sin embargo, muchos vieron ganar al irlandés, que acabó el combate mucho mejor que su rival y demostrando una vez más que ganarles no es misión imposible. Por último, la prueba definitiva fue la del pasado 1 de febrero en la UFC Fight Night de Abu Dhabi.
Allí, Said Nurmagomedov (18-4) -no es familia a pesar del apellido- también sucumbió por decisión unánime ante Vinicius Oliveira, mientras que el famoso striker Shara ‘Bullet’ Magomedov (15-1) perdió su invicto ante Michael ‘Venom’ Page. Ambos peleadores daguestaníes se vieron superados por sus rivales, por lo que las palabras de Dvalishvili tan solo son un aliciente más a una realidad que cada vez es más palpable.