Un punto y gracias para el Betis en Bélgica

Un punto y gracias para el Betis en su visita a Bélgica. Al equipo de Pellegrini no le han sentado tan bien como en otras ocasiones las rotaciones y no ha podido a pasar del empate sin goles frente al Genk en un partido con muy poca historia en el que, de hecho, quien más cerca estuvo de llevarse la victoria fue el conjunto local, con una ocasión clarísima en la segunda parte que terminó con un disparo al palo.

Los verdiblancos, eso sí, se mantienen invictos en la competición, con cinco puntos en tres jornadas, y aún no han perdido ni un solo partido lejos de La Cartuja en lo que va de temporada. El objetivo de pasar de ronda está un poquito más cerca para un Betis , pero tendrá que mejorar sus prestaciones si quiere terminar entre los ocho primeros clasificados y evitar el cruce de playoffs de febrero, Hoy dejó pasar una buena oportunidad ante un rival claramente inferior a nivel técnico, pero que no pasó demasiados apuros para sumar su cuarto punto en la competición y mantenerse en la pelea por clasificarse.

Un primer tiempo para olvidar

La lluvia que cayó con fuerza durante el mediodía sobre el Cegeca Arena paró justo antes de que arrancara el partido, como queriendo no ser excusa para que no se viera un buen fútbol sobre el césped. Pero Genk y Betis se empeñaron desde el pitido inicial en que la primera parte fuera, sencillamente, soporífera. El conjunto belga quería, pero no podía o no sabía cómo hacerlo. Un equipo bastante limitado técnicamente, que sólo en alguna transición rápida lograba acercarse al área para acabar atascándose sin llegar a rematar. Mientras que los verdiblancos, por su parte, dejaban pasar el tiempo, esperando ganar con alguna genialidad de sus estrellas con la ley del mínimo esfuerzo.

Hubo que esperar 25 minutos para ver el primer remate a puerta, en una jugada en la que Riquelme controla un pelotazo de Ruibal, aprovecha la pasividad de Nkuba para plantarse en la frontal del área y golpea demasiado centrado, fácil para Van Crombugge. Un remate sin peligro, al contrario que el que protagonizó también ‘Roro‘, diez minutos después, obligando a Sadick a lanzarse al césped para evitar el 0-1 tras un grave error de su equipo en la salida desde atrás. Aunque para acción defensiva de mérito, la de Smets sacándole prácticamente de la bota a Bakambu el balón cuando se disponía a culminar en el área una veloz transición con él, Lo Celso y el ex del Atlético como protagonistas.

El resto de intentos del equipo de Pellegrini antes de enfilar el camino hacia los vestuarios fue totalmente infructuoso. Tanto como las dos o tres llegadas del conjunto belga, que tenía en el orden de Heynen y el impulso del jovencísimo Karetsas sus principales armas, pero al que le faltaba mucha clarividencia cuando a duras penas se acercaba al área de Valles, espectador de lujo en los primeros 45 minutos. El partido necesitaba a alguien que lo agitara y desde el banquillo del Betis tiraron de Pablo García en el intermedio, dejando en la caseta a Antony, que había visto una amarilla y se había jugado la segunda.

El banquillo tampoco fue la solución

El esperado paso adelante del Betis para intentar llevarse los tres puntos tardó en llegar. Antes, Nkuba, con un remate desde fuera del área que rozó en Bakambu cambiando completamente su trayectoria, obligó a Valles a intervenir por primera vez en el partido. Pero en cuanto el equipo de Thorsten Fink se animaba a ir hacia arriba, dejaba unos espacios atrás que los verdiblancos trataban de castigar a la contra. El delantero congoleño estuvo a punto de aprovecharlo en el primer intento, después de un buen balón de Lo Celso a Riquelme, cuyo centro atrás pilló al Príncipe de Montequinto un poco a contrapié. Una ocasión que provocó un paso atrás inmediato de los belgas.

A la hora de partido, Pellegrini quiso darle una vuelta de tuerca más a su equipo tirando de dos titularísimos como Fornals y Abde. Sin embargo, nada cambió. Si acaso, que el Genk, poco a poco, empezó a creerse que podía arañar algo más que el empate. Tanto, que entre Bartra y Altimira tuvieron que emplearse a fondo para bloquear un disparo de Heynen, completamente solo en la frontal. Así que, en vista de que todo seguía igual, el técnico chileno apostó por el Cucho y el Chimy esperando cargar más el área para deshacer el empate. El resultado: la ocasión más clara de partido… para los belgas.

Los verdiblancos no finalizaron una jugada de ataque con muchos efectivos en campo contrario, el Cucho perdió la pelota en una zona comprometida y Heynen filtró un sensacional balón al surcoreano Oh, que se plantó en ventaja en el área, algo escorado, y disparó raso, cruzado… a la madera. Un pelotazo en la cabeza que dejó K.O. a Ruibal y un intento de Pablo García desde fuera del área fueron las últimas acciones de un partido gris, con muy pocas oportunidades y en el que seguir sumando es la única noticia positiva para el Betis, que pone fin a su espectacular racha de 32 partidos seguidos marcando.