Fitch Ratings disminuye calificación de Colombia de ‘BB+’ a ‘BB’, pero con una perspectiva estable

Durante este martes 16 de diciembre del 2025, la agencia calificadora Fitch Rings reportó que la calificación de Colombia como emisor a largo plazo en moneda extranjera tuvo una disminución de BB+ a BB, pero con una perspectiva estable.

Una de las razones de esta decisión son déficits fiscales persistentes que hacen impulsar el aumento continuo de la deuda del gobierno general (GG) a mediano plazo con relación con el PIB.

“Persistentes déficits fiscales elevados, que provocarán que la deuda pública general (GG) en relación con el PIB siga aumentando a medio plazo y se aleje aún más de la mediana de sus pares”, afirmó Fitch Rings.

Al mismo tiempo, advierte la ausencia de un ancla fiscal creíble que se fusione con una mayor rigidez en el gasto público y algunas posibles restricciones políticas para ejecutar medidas de recaudación impositiva, dificultarán la consolidación fiscal después de las elecciones legislativas y de Presidencia del 2026.

“Estos factores estructurales limitan la capacidad del gobierno para estabilizar las finanzas públicas en el horizonte mediano”, resalta el informe de la calificadora.

Pese a la disminución, algo que resalta el informe es que las calificaciones de Colombia se encuentran sustentadas en un sólido historial de preservación de la estabilidad macroeconómica y financiera ante los distintos traumas tanto internos como externos. El apoyo es consecuencia de un banco central independiente (Banco de la República) porque este ha sabido controlar la inflación y la solidez del sistema financiero.

Para el 2026, Fitch Rings predice que el déficit del Gobierno central tendría un mayor deterioro hasta el 7,5 % del PIB, una cantidad mayor al objetivo presupuestario del Gobierno Petro que es del 6,2 %.

Daniel Velandia, managing director de Research, aseguró que la reducción de la calificación por parte de Fitch estaba “relativamente bien descontada por los mercados”.

“En general, Fitch resalta los desafíos que todos los economistas en Colombia hemos venido resaltando en los últimos meses y en particular es evidente el efecto negativo que ha generado la suspensión de la regla fiscal por el hecho de que no haya acuerdos entre el Congreso y el Gobierno para sacar adelante reformas tributarias que permitan ordenadamente hacer un ajuste a los ingresos y al déficit fiscal”, explicó Velandia.

En ese sentido, el experto destaca que ahora son dos las calificadoras que tienen a Colombia en BB.

“La buena noticia en medio de todo es que se mantiene la perspectiva estable en la calificación, pero es evidente que seguirán las presiones fiscales y va a ser determinante lo que haga el próximo Gobierno en términos de un plan de ajuste creíble para que deje de haber riesgos sobre la calificación soberana y sobre los costos de financiamientos del país”, agregó.