Deportes

A la Selección Colombia femenina le faltó fútbol, no ‘mentalidad’… (Meluk le cuenta, opinión)

Published

on



La Selección femenina volvió a caer antes de la última campanada y perdió otra vez la Copa América de cristal. El carruaje triunfal dorado se convirtió de nuevo en una ahuyama, y el vestido largo de coronación se hizo un overol sudado y sucio de hierba y tierra.

La nueva derrota en la final contra Brasil, la potencia del área, el único rival al que no ha podido vencer el equipo femenino, no se explica jamás desde la burda y facilista salida de las supuestas faltas de “mentalidad” y “ADN ganador” del fútbol colombiano.

Leicy Santos de Colombia reacciona al perder la serie de penales contra Brasil en la Copa América. Foto:EFE/ Jose Jácome

A Colombia le faltó fútbol en Ecuador

Opinión ligera. La nueva derrota, dolorosa y cruel, por muy sobrecogedora que sea, se explica por el fútbol y desde el fútbol.

Primero, equivocó el camino en el primer tiempo cuando ganaba 1-0 y, con Brasil desaparecido, las jugadoras decidieron pelear, jugar a los empujones, medirse en rudeza y reclamos a la árbitra. En la última jugada antes del descanso, Jorelyn Carabalí pegó un cabezazo sin balón en la cara a una rival y resucitó a Brasil con un penalti. Y era roja.

La mayor parte del segundo tiempo, Colombia jugó decididamente mal, incluso en la ventaja 2-1 por el autogol de Brasil. No dio dos pases seguidos, excepto en la combinación aislada de Linda Caicedo para el golazo del 3-2 de Mayra Caicedo en el minuto 88. ¡Quedaban 8 minutos, contando los 6 de descuento, y el equipo entró en una ‘quemadera’ de tiempo descarada!

Mayra Ramírez, figura de Colombia Foto:AFP

Martha ‘vacunó’ a la Selección

En la hipocresía futbolera, cuando el equipo de uno es el que quema tiempo se habla de “oficio”, pero cuando lo hace el equipo rival, se califica de antifútbol. Pues lo de la Selección fue un evidente exceso de “oficio”, y el fútbol se lo cobró con el golazo de Martha a 20 segundos del límite de tiempo. Fue el 3-3 que alargó el partido. En el último cobro de una falta de costado desde muy lejos, con el ollazo cantado, ¿cómo es posible que ninguna jugadora ni el DT, Ángelo Marsiglia, estuvieran pendientes de marcar en la zona de rebote nada menos y nada más que a Martha, que, íngrima, partió el papayazo. ¡Dejaron libre a la mejor jugadora de la historia! ¡Imperdonable!

El equipo, en lo que sí fue un evidente exceso de mentalidad y coraje –¡ahí, sí!– empató 4-4 en el extratiempo con un golazo de tiro libre. La derrota en el desempate final por penaltis también se explica desde el fútbol, en las pésimas ejecuciones de Pavi , Santos y Carabalí…

Repito: es burdo y facilista explicar la derrota en las supuestas faltas de “mentalidad” y “ADN ganador”. A esta Selección Colombia lo que le faltó fue fútbol, como le venía faltando desde hace rato y, en cambio, estuvo a punto de ser campeona por exceso de mentalidad y ganas. En esta Copa América empató 4 de sus 6 partidos (Venezuela, Argentina y dos veces vs. Brasil y venció a las débiles Bolivia y Paraguay), y apenas ganó dos de los 13 juegos previos que tuvo (5 empates y 6 derrotas).

Katherine Tapia, arquera de Colombia Foto:AFP

La Selección femenina perdió, otra vez, su Copa América de cristal antes de dar las 12…

Meluk le cuenta

Gabriel Meluk

Editor de DEPORTES

@MelukLeCuenta



Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Trending

Salir de la versión móvil