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Dejó inconscientes a los delincuentes

 
Andrei Mostovói, jugador del Zenit San Petersburgo, marcó un gol al Dinamo de Moscú apenas tres días después de sufrir un intento de secuestro por el que fueron detenidos cuatro delincuentes.
Lo que lo salvó fue su capacidad para analizar la situación en una fracción de segundo.
El incidente ocurrió cerca de una tienda de lujo en la isla Krestovsky y sólo se evitaron consecuencias más graves gracias a la rápida reacción del futbolista y su amigo, el jugador de hockey sobre hielo Alexander Grakun, que sorprendió a los secuestradores.
Logró reducir a los secuestradores física y mentalmente, dejándolos inconscientes. Estos terminaron huyendo en estado de shock
“Lo que lo salvó fue su capacidad para analizar la situación en una fracción de segundo. Logró reducir a los secuestradores física y mentalmente, dejándolos inconscientes. Estos terminaron huyendo en estado de shock. Andrey, por supuesto, tiene piernas de oro. Pudo escapar rápidamente”, explicó la madre de Andrei Mostovói en el diario KP-Petersburg.
Andréi Mostovói, en un partido con el Zenit.
La prensa rusa informó que Mostovói y Grakun fueron sorprendidos por tres hombres encapuchados que saltaron de una furgoneta para intentar detenerlos. Su intención era obligarlos a subir al vehículo para secuestrarlos, pero su rápida reacción frustró el intento.
Los delincuentes fueron detenidos tras intentar secuestras al hijo de un político
Tras fracasar en ese primer intento, los delincuentes volvieron a intentarlo, secuestrando a Sergei Selegen, yerno de un conocido político local.
Inicialmente lograron secuestrarlo y, tras exigirle 10 millones de rublos (110.000 euros), Sergei les entregó lo que tenía (unos 2.000 euros).
El secuestro continuó, y cuando comenzó el intercambio de dinero, la policía intervino y detuvo a cuatro de los secuestradores; un quinto fue arrestado poco después.







