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El Atlético se la deja botando… al Barcelona
No fue muy diferente a otras tantas tardes en las que todo apuntaba a gesta, pero en esta ocasión se quedó en conato. El Atlético podía ponerse líder tras el empate del Real Madrid en El Sadar, pero la expulsión de Barrios a los siete minutos ponía el partido cuesta arriba. Y mucho más el gol del Celta a falta de 20 minutos. Tocaba remontada, el Metropolitano creyó y por momentos la acarició después de que Sorloth igualara el partido. Pero se quedó en eso. Un empate y ‘victoria’ para el Barcelona, que este domingo puede ser el primero en la apasionante carrera por LaLiga.
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Sorloth, un gigante que se come todo
Después de que Starfelt completara un partido más que aseado, lo que no podía imaginarse es que otro escandinavo se lo fuera a llevar por delante. Sorloth hizo un llavero del sueco para controlar un gran pase de Giménez, regatearle con el cuerpo y fusilar a Guaita. Lo arrasó literalmente, demostrando una vez más que no hay barreras para el noruego. Ya son 12 tantos, un lujo saliendo desde el banquillo.
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Griezmann, a cuentagotas
Duele ver que Griezmann ya no puede correr al espacio, que todos los balones los pide al pie y que los partidos en los que tiene que hacer un sobresfuerzo por jugar con uno menos o los que toman vértigo empiezan a costarle un mundo. Eso sí, que nadie le jubile aún, porque cuando tiene el balón en sus botas, la cosa cambia y es capaz de inventarse el pase imposible que en esta ocasión no encontró. Lo que se pierde por una parte, se gana por otra.
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Barrios, ‘enemistado’ con el VAR
Resulta curioso que un jugador de talento, de los que siempre quiere el balón y de esos por los que merece pagar una entrada, haya sido expulsado por roja directa dos veces en un mes. Las dos por ir al suelo en una disputa y después de que el VAR corrigiera la decisión inicial del árbitro de castigarle con amarilla. De manera justa en ambas ocasiones, tanto contra el Leverkusen como frente al Celta. El colmo para un Barrios dolido por dejar al equipo con diez antes del descanso es que hace una semana, cuando Ceballos puso en riesgo su integridad con un pisotón que también merecía la roja directa, no hubo llamada desde la sala VOR.
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¿A qué juega el Celta?
Es la pregunta que se hacía más de uno al ver las variantes tácticas propuestas por Giráldez. ¿Es defensa de tres o de cuatro? ¿Cuatro en el medio o se incluye la función del lateral moderno que percute por el carril interior? Una estructura, en definitiva, que varía en función del ataque y la defensa. Sin embargo, hay que recordar que en el fútbol ya está casi todo inventado y muchas veces es todo mucho más sencillo: después de tener el balón todo el partido, jugar con uno más y adelantarte en el tramo final no puedes conceder dos puntos jamás.