Deportes
Esther Gómez Díez de la Cortina lidera el primer equipo militar femenino de la Copa del Rey

Su día a día transcurre como residente de tercer año de Medicina Intensiva en el Hospital militar Gómez Ulla de Madrid. Esta semana, la capitán Esther Gómez Díez de la Cortina, de 28 años, ha cambiado la UCI por el Real Club Náutico de Palma para liderar un proyecto pionero: la primera tripulación femenina íntegramente militarde las 43 ediciones de la Copa del Rey MAPFRE.
Las cinco tripulantes han sido seleccionadas por el Consejo Superior de Deportes Militar del Ministerio de Defensa tras sus resultados en el Campeonato anual de vela militar celebrado en abril en Marín (Pontevedra). Es la primera vez que las cinco, con mucha experiencia navegando y compitiendo, lo harán juntas. El reto es doble ya que es un barco diferente con el que ellas suelen competir. Aunque sólo han podido entrenar 9 días, se conocen desde hace tiempo y esperan que esa complicidad se note en el agua. La mayor tiene 30 años y la más joven 23.
Ellas toman el mando
Gómez es la patrona de un barco que reúne a las tenientes Irene Sánchez (UME) y María Montesinos –ambas del Ejército de Tierra– a la teniente Mercedes Fernández, que trabaja en Control Aéreo del Cuartel General del Ejército del Aire y a la sargento Alejandra Vicens (Mando Ciberdefensa). Aunque Esther es la patrona, reparte méritos. “Dentro del barco cada una es jefa de su puesto”, asegura antes de debutar.
Ha sido una preparación exprés e intensa porque nosotras no hemos dejado de lado nuestra vida laboral
“Ha sido una preparación exprés e intensa porque nosotras no hemos dejado de lado nuestra vida laboral, nos hemos adaptado a lo que teníamos para poder entrenar. Yo, por ejemplo, he juntado guardias en el hospital. El objetivo es hacer un buen papel representando a las Fuerzas Armadas y abrir camino para que cada vez más haya más mujeres que naveguen. Ojalá sirva para fomentar el deporte femenino y que otros años puedan participar en la Copa incluso dos equipos”, dice Gómez, que agradece a la Armada su ayuda.
Esther Gómez Díez de la Cortina, en el RCNP.
El objetivo es hacer un buen papel representando a las Fuerzas Armadas y abrir camino para que cada vez más haya más mujeres que naveguen
El Ejército y la vela, sus dos pasiones
Debutan este miércoles en la Balearia Women’s Cup, la clase femenina de la 43 Copa del Rey MAPFRE en la que compiten 15 barcos. Todos ellos de nacionalidad española, salvo uno brasileño. “Poder competir en la Copa del Rey es una oportunidad buenísima, pero sabemos que no tenemos opciones de ganar porque aquí todo está muy profesionalizado. Hay regatistas que compiten en campaña olímpica (como Marta Cardona, campeona mundial y europea de 470 mixto este año junto a Jordi Xammar). Nosotras somos un grupo que siempre hemos navegado, pero que no entrenamos juntas habitualmente”, recuerda.
A diferencia de su pasión por las Fuerzas Armadas, que le viene de familia –su padre es teniente coronel de Artillería–, su afición por la vela no es heredada. “En mi familia nadie navega, soy la primera”, desvela entre risas.
Empezó con un curso de verano en el Club Náutico de Melilla en Optimist, después se pasó al Laser 4.7 y luego a Snipe, clase en la que ha llegado a competir en un Mundial. En las Fuerzas Armadas navega con el capitán de Navío Enrique Flethes. Y aunque lleva compitiendo desde los 10 años, reconoce que la Copa del Rey es especial. “Era una meta a nivel deportivo”, asegura.