Si FINUL no actúa “lo haremos nosotros y con gran fuerza”, dice Israel ante posible tregua

Jerusalén, 26 nov (EFE).- El reciente nombramiento de Israel Katz como ministro de Defensa de Israel trae consigo advertencias sobre la misión de paz de la ONU en el sur del Líbano (FINUL). Katz declaró este martes que si la FINUL no actúa para prevenir el rearme de Hizbulá, Israel responderá con “fuerza” ante cualquier posible amenaza, especialmente si hoy se firmara una tregua.

“Tomaremos medidas en contra de cualquier amenaza, en cualquier momento y lugar; exigimos a la FINUL que aplique la ley de manera efectiva, derribando cada hogar reconstruido en el sur del Líbano que albergue una base terrorista”, insistió Katz en un comunicado, tras su reunión con la coordinadora especial de la ONU para el Líbano, Jeanine Hennis-Plasschaert.

“Si ustedes no lo hacen, nosotros lo haremos con gran fuerza,” advirtió Katz, quien mencionó como amenazas cualquier tipo de armamento y contrabando que beneficie al grupo libanés proiraní.

En el inicio de la reunión, Katz destacó que Israel “no comprometerá” la seguridad de los residentes del norte, y subrayó que el regreso a sus hogares de más de 60,000 desplazados en el último año es una prioridad esencial.

“Así, no puede ocurrir que Hizbulá se rearme y fortalezca en Líbano mientras la FINUL y el Ejército libanés permanecen indiferentes,” señala el comunicado, demandando “mecanismos efectivos e inflexibles” de supervisión.

Esta tarde, se reunirán la coalición gubernamental de Benjamín Netanyahu y el Gabinete de Seguridad para discutir y dar luz verde al acuerdo, que podría implementarse en próximos días después de que el Ejército israelí confirmara el logro de sus objetivos en la guerra del Líbano.

La propuesta comprende tres etapas en un plazo de 60 días: el repliegue de las fuerzas de Hizbulá al norte del río Litani, una retirada total de las tropas israelíes del sur del Líbano y el despliegue de soldados libaneses, así como garantías por parte de EE.UU.

De este modo, la tregua incluye la formación de un organismo internacional de supervisión a cargo de Estados Unidos, que involucrará a Reino Unido, Alemania, Francia y posiblemente un país árabe.

Israel ha condicionado su tregua con la posibilidad de volver a atacar Líbano bajo tres circunstancias: el rearme de Hizbulá, la preparación de un ataque contra el territorio israelí o el retorno de los milicianos proiraníes al sur del país, según fuentes filtradas.

Medios israelíes sugieren que el Ejército podría responder si se identifica una amenaza “inmediata”, mientras que en otros casos será el comité internacional quien deba actuar en consecuencia. EFE

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