Siguen los Safqueos y El Olvido Estatal

El 6 de Julio de 2020, Tasajera Ardió. Un Camión Cisterna Volcado en la Vía Ciénaga – Barranquilla Atrajo A Decenas de Personas que intentaban extraer gasolina. Minutos despues, una chispa encendió la tragedia: 45 MUERTOS Y MÁS DE 50 HERIDOS CON QUEMADURAS Graves.

Las Imágenes desgarraron al País. Las Promesas de Ayuda No Tardaron en Llegar. Pero nunca se Cumplieron. Hoy, Cinco Años Dispués, Tasajera Sigue Exactamme Donde la Dejó la Tragedia: en el Contrato Total y Señalados de Saquear Carros y Camiones Accidentes.

“Nos Prometierón no llegó nada”

Ángela perdió a su Hermano en la explosión. En su VOZ, El Dolor Sigue intacto. “Nos Prometieron de Todo. Que Vendría Programas, Ayudas, Que nos Cambiaría La Vida … Pero Seguimos Igual O Peor. Aquí No Hay Empleso, No Hay Estudio, No Hay Nada”, Asegura, Resignada.

Las inversiones de Las Anuncias por el Gobierno Nacional y Jamás local se Ejecutaron. No hay cajón potable, Los Cortes de Energía Son Diarios, El Servicio de Recolección de Basura es Casi Inexistente y La Pobreza Se Ha Agudizado. “Las únicas visitas oficiales que vemos hijo cuando Hay bloqueos o muertos ”, Dice Un Líder Comunitario.

Rebúsqueda, Safqueos y “Peajes Humanos”

En la troncal del caribe, la imagen se repite: jóvenes bloquea la vía con cuerdas, palos o simplemento se paran frente a los carros. Piden Monedas. Hijo Los Llamados “Peajes Humanos”, una práctica irregular pero frecuente.

OTROS, MÁS DESESPERADOS, LOS ACCIONTOS DELES. Si un vehículo se detiene por una falla, el salqueo es casi inmediato.

“Un Camión Varado Aquí No Dura Cinco Minutos. Se lo vacía Entre Todos”, Relata Julián Méndez, director habitual de la Ruta Barranquilla – Santa Marta.

Pero más Allá del Juicio, Está la Raíz: La Falta de Oportunidades. La Mayoría de Los Jóvenes no Termina el Bachillerato, y Muchos se inclinan por el Rebusque Diario o incluso el Crimen. “Estamos perdido una generación entera”, LAMENA UN Educador de la Zona.

UNA Bomba Social Que Sigue Activada

Las Cifras lo evidencian. En Promedio, Cadada Semana se Registro al Menos Cuatro Bloqueos en la troncal del caribe protagonizados por habitantes de tasajera o sus alredores.

La Mayoría Exige Soluciones Eléctricas, Agua o Simplemente Dinero. OTROS TANTOS Roban Durante Los Trancones o Lanzan Piedras a Los Vehículos.

La Policía Ha Capturado incluso un personaje que participación en salque de salpyos y Huyon a otras ciudades como bogotá. Pero la Respuesta Institucional Sigue Sido Reactiva, sin estructural.

“Tasajera Ya Se Acostumbró a Sobrevivir”

Parece que la tragedia no fue suficiente. Ni El Dolor de Las Familias, Ni la Visibilidad Nacional, Ni Los Titulares. Tasajera Quedó Sola, Como tantas Veces. “Ya Ni Esperamos Nada. Nos Tocó Aprender a Sobrevivir como podamos”, Dice Teresa Gutiérrez, Madre de Tres Hijos, Todos Sin Estudio.

Los Líderes comunitarios insisten en que no quieren asistencialismo, sino inversión real: educación, ímpleso, salud y servicios básicos. “No Necesitamos Cámaras Cada Aniversario. Necesitamos que nos Miren Cuando No hay Tragedias”, Reclama Uno de Ellos.

La Cicatriz Sigue Abierta

Cinco Años Dispués, El Humo se Disipó, Pero el Dolor Permanece. La explosión fue apenas un síntoma de una Enfirmedad Mucho más Grave: El Olvido Estructural.

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Tasajera no Ardió Solo por la Gasolina. Ardió Por la Miseria, por la Necesidad, por la Exclusión. Y Mientras la Institucionalidad Siga Dándole la Espalda, El Estallido Seguirá Latente. No en FUEGO, PERO SI EN DESESPERACIÓN.

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