Economia

Ventas Minoristas en Colombia se estabilizan en julio: Fenalco

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Bogotá, 25 de agosto de 2025. En un panorama económico marcado por la cautela, el comercio minorista colombiano muestra señales mixtas que invitan a un análisis profundo. Según el más reciente informe de la Bitácora Económica de la Federación Nacional de Comerciantes (FENALCO), en julio de este año, el 38% de los empresarios reportó un incremento en sus ventas comparado con el mismo mes de 2023. Sin embargo, este aparente repunte se ve empañado por un contexto más amplio que revela desafíos persistentes en el consumo interno.

Jaime Alberto Cabal, presidente de FENALCO, subraya la necesidad de interpretar estos datos con prudencia. «El análisis del primer semestre confirma una tendencia creciente en las ventas, aunque debe leerse con cautela. En 2024, hasta julio, las ventas reales del comercio al por menor descendieron un 1,7%, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE). En ese contexto, lo que hoy vemos es más una corrección estadística que una verdadera expansión del consumo», afirmó Cabal en declaraciones recogidas por el informe. Esta perspectiva pone en evidencia que, pese a los brotes verdes en julio, el sector no ha superado del todo las turbulencias acumuladas desde el año pasado.

Factores que Frenan el Impulso

A pesar de los esfuerzos del Banco de la República por estabilizar la inflación mediante ajustes en las tasas de interés, el comercio minorista enfrenta obstáculos significativos. FENALCO advierte que la baja confianza del consumidor, agravada por la incertidumbre fiscal y la debilidad de la demanda interna, actúa como un freno de mano para el crecimiento. Estos elementos no son nuevos: la inflación, aunque en descenso, ha erosionado el poder adquisitivo de los hogares, mientras que las reformas tributarias y laborales propuestas por el gobierno generan inquietud entre los inversionistas.

El informe destaca, además, el rol crucial de las remesas en la amortiguación de esta caída. Estas transferencias familiares, procedentes principalmente de colombianos en el exterior, han sostenido el gasto de millones de hogares. El incremento en la migración en los últimos años —impulsado por factores como la inestabilidad política y económica— ha elevado el flujo de estos recursos, convirtiéndolos en un pilar inesperado para el consumo. Según estimaciones del Banco de la República, las remesas superaron los 9.000 millones de dólares en 2023, y la tendencia alcista continúa en 2024, inyectando liquidez en un mercado que de otra forma estaría más contraído.

No todo es positivo en este panorama. La agremiación señala que la economía informal y actividades de alto riesgo, como la minería ilegal, generan flujos de dinero que distorsionan la lectura del mercado. Estos ingresos no corresponden al esfuerzo productivo formal y pueden inflar artificialmente las cifras de consumo en ciertas regiones, complicando las proyecciones económicas. «Es como medir la temperatura con un termómetro roto», ilustra un analista consultado por este medio, refiriéndose a cómo estos factores opacan la verdadera salud del sector formal.

Cumplimiento de Metas: Una Mirada al Semestre

El informe de FENALCO también desglosa el desempeño presupuestario de los empresarios durante el primer semestre de 2024. Los resultados son reveladores: el 39% no alcanzó ni el 90% de su presupuesto de ventas, lo que indica un rezago significativo en la recuperación. Por otro lado, el 18% se ubicó entre el 90% y el 99%, el 26% cumplió exactamente con lo proyectado, y solo un 17% superó sus objetivos. Estas cifras pintan un cuadro de desigualdad dentro del sector, donde las grandes cadenas minoristas podrían estar absorbiendo la mayor parte de los beneficios, mientras que los pequeños comerciantes luchan por mantenerse a flote.

Este desbalance se atribuye en parte a la concentración del mercado en centros urbanos como Bogotá, Medellín y Cali, donde el acceso a créditos y la diversificación de productos permiten una mayor resiliencia. En regiones periféricas, en cambio, la dependencia de la agricultura y el turismo —afectados por el clima y la inseguridad— agrava las dificultades.

Expectativas: Optimismo Moderado

De cara al futuro inmediato, las expectativas de los empresarios reflejan un optimismo moderado. El 39% se declara positivo respecto a sus resultados en los próximos meses, el 49% anticipa estabilidad, y solo el 12% prevé un deterioro. Estos números sugieren que las medidas macroeconómicas, como la reducción gradual de las tasas de interés por parte del Banco de la República, podrían estar comenzando a surtir efecto. Sin embargo, Cabal insiste en que la clave radica en políticas que fortalezcan la confianza del consumidor y estimulen la demanda interna, como incentivos fiscales para el consumo o programas de apoyo a las pymes.

En un contexto global de incertidumbre —con guerras comerciales y fluctuaciones en los precios de las materias primas—, Colombia debe apostar por una diversificación económica que reduzca su vulnerabilidad. Las remesas y la informalidad, aunque útiles como amortiguadores temporales, no sustituyen a un crecimiento sostenible basado en inversión productiva y empleo formal.

Este informe de FENALCO no solo es un termómetro del comercio minorista, sino un llamado a la acción para policymakers y empresarios. Si se abordan los factores limitantes con urgencia, el sector podría transitar de una «corrección estadística» a una recuperación genuina. De lo contrario, el riesgo de estancamiento persiste, afectando no solo a los balances contables, sino al bienestar de millones de colombianos.

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